Hace un año, el Santo Padre Benedicto XVI nos convoca a celebrar una vigilia de oración por la vida naciente, en todas las iglesias particulares. Así lo hicimos en Granada, con una hermosa Eucaristía que comenzó con el rezo de vísperas. Granada respondió con generosidad y mostró una vez más que es un pueblo que ama la vida. Podéis encontrar una breve reseña en este enlace: Crónica de la Vigilia por la Vida Naciente.
Decía D. que en la homilía del año pasado en la Vigilia por la vida naciente que “…la oración por la vida naciente tiene en nuestro mundo una urgencia particular, por la sencilla razón de que el aborto es la mayor causa de víctimas, y de víctimas inocentes, que hay en nuestra tierra en este momento”. Más adelante añadía: “Vamos a orar al Señor que viene diciéndole “¡Ven Señor Jesús!”, vamos a pedirle que su venida ilumine nuestras vidas, para que haya paz en nuestros corazones, para que nos sepamos salvados y redimidos por Cristo, para que tengamos la experiencia precisa y humana de su amor, y para que ese amor se viva en la comunidad cristiana, una comunidad en la que se es consciente de la necesidad de los unos de los otros, de que Dios nos quiere unidos, juntos, cercanos los unos a los otros, como un pueblo, como un cuerpo visible también a los ojos del mundo, visible por la misericordia sin límites de su amor”.
Un bello programa para estos días que nos preparamos para el Adviento, y para comenzarlo rezando juntos por la vida naciente.
Un bello programa para estos días que nos preparamos para el Adviento, y para comenzarlo rezando juntos por la vida naciente.