Niños consentidos que dan órdenes a sus padres y chantajean y terminan saliéndose con la suya porque nadie puede frenarlos, o que engañan y ridiculizan a sus mayores; adolescentes agresivos. ¿Qué hacer ante esto? Es necesario reforzar la labor educativa, y recordar los tres pilares básico en los que es necesario apoyarse: la confianza, la competencia y la autoridad.
Pero recordemos el decálogo del Juez Calatayud:
1: Comience desde la infancia dando a su hijo todo lo que pida. Así crecerá convencido de que el mundo entero le pertenece.
2: No se preocupe por su educación ética o espiritual. Espere a que alcance la mayoría de edad para que pueda decidir libremente.
3: Cuando diga palabrotas, ríaselas. Esto lo animará a hacer cosas más graciosas.
4: No le regañe ni le diga que está mal algo de lo que hace. Podría crearle complejos de culpabilidad.
5: Recoja todo lo que él deja tirado: libros, zapatos, ropa, juguetes. Así se acostumbrará a cargar la responsabilidad sobre los demás.
6: Déjele leer todo lo que caiga en sus manos. Cuide de que sus platos, cubiertos y vasos estén esterilizados, pero no de que su mente se llene de basura.
7: Riña a menudo con su cónyuge en presencia del niño, así a él no le dolerá demasiado el día en que la familia, quizá por su propia conducta, quede destrozada para siempre.
8: Dele todo el dinero que quiera gastar. No vaya a sospechar que para disponer del mismo es necesario trabajar.
9: Satisfaga todos sus deseos, apetitos, comodidades y placeres. El sacrificio y la austeridad podrían producirle frustraciones.
10: Póngase de su parte en cualquier conflicto que tenga con sus profesores y vecinos. Piense que todos ellos tienen prejuicios contra su hijo y que de verdad quieren fastidiarlo.
«Reflexiones de un juez de menores» es un intresante libro que recoge las reflexiones que el Juez de Menores de Granada, Emilio Calatayud, ha ido expresando a lo largo de estos últimos años en conferencias, entrevistas, ponencias…Emilio Calatayud nace en Guadalajara, Licenciado en ICADE y Licenciado en Derecho por la Universidad de Granada, abogado en ejercicio, ingresa en 1980 en la Carrera Judicial en Tenerife y en 1984 es destinado a Granada, donde se ha especialidado como Juez de Menores.
Emilio Calatayud, 2007. «Reflexiones de un juez de menores».
ED. DAURO. Granada.