Día sexto: Transformados por el amor inconmovible de Dios. Nuestra fe es la que vence al mundo (cf. 1 Jn 5, 4). En este día nuestra atención se concentra en el amor fiel de Dios. El misterio pascual revela este amor fiel y nos llama a una nueva forma de fe. Esta fe supera el temor y abre nuestros corazones al poder del Espíritu. Esta fe nos invita a la amistad con Cristo y, de este modo, de unos con otros.
Fuente: Semanario Fiesta. Diócesis de Granada y Guadix-Baza.