El próximo domingo, segundo domingo de Pascua, comienza en nuestra Archidiócesis la X Semana Diocesana de la Familia, que bajo el título de “Delante de Dios y de los hombres” se prolongará hasta el viernes próximo y quiere ser un momento de preparación para el próximo Encuentro del Santo Padre con las Familias en Milán en junio de este año.
“Delante de Dios y de los hombres” indica el doble horizonte evocado por el tema del VII EMF: “Ante Dios» alude, en efecto, a la Fiesta centrada en la Eucaristía, donde se muestra el sentido último de la existencia. «Ante los hombres» expresa la dimensión social de la vida humana que en la experiencia del trabajo encuentra una de sus formas de realización responsable, más aún en estos momentos de tanta dificultad de trabajo para muchas familias.
Estos últimos días están siendo de mucho trabajo, muchos detalles que se van presentando referente a nuestra Semana de la Familia. Pero ha habido uno que nos ha llenado de alegría.
Cuando programamos por junio pasado las fechas de la semana, no caímos en la cuenta de que comenzábamos precisamente el Domingo de la Misericordia. Ahí vemos como El va por delante, El hace su programa: Ver la familia, ponerla delante de Dios, “Ante Dios”. Que abismo de amor y misericordia; decía D. Javier en el 2008, hablando en la Semana de la Familia sobre la Roca que se construye cada familia, unas palabras que nos parecen de tal belleza y que recoge perfectamente quien es Cristo para la familia: «Lo que hace del matrimonio un sacramento es que el amor de un esposo y una esposa cristianos, es decir, que conocen el amor de Cristo, y que conocen quién es Cristo, tiene tal espesor, tal densidad en sí mismo (y estoy hablando del amor, y de todas las formas y manifestaciones del amor), que ese amor es signo de que Cristo vive y es el Redentor del hombre. Y es el Esposo pleno. Es decir, es quien cumple los deseos más profundos de felicidad y de plenitud del hombre, y del cual es imagen ese amor de los esposos: como amor incondicional, como amor sin límites, como amor fiel, como amor para siempre…”
¡Qué oportunidad de vivir nuestra fe en familia! qué hermoso y bello vivir la fe en familia; es en la familia donde se aprende a andar y a hablar, el primer lugar donde se nos habla de Cristo y se nos enseñan a creer en El y creemos sin haberlo visto ni tocado, sin miedo ni incredulidad.
Es la fe en Cristo resucitado la que alienta la vida de la familia y la hace pequeña iglesia doméstica, comunidad donde se aprende a compartir y a repartir todo lo que tenemos, como los primeros cristianos.
“Delante de Dios y de los hombres” indica el doble horizonte evocado por el tema del VII EMF: “Ante Dios» alude, en efecto, a la Fiesta centrada en la Eucaristía, donde se muestra el sentido último de la existencia. «Ante los hombres» expresa la dimensión social de la vida humana que en la experiencia del trabajo encuentra una de sus formas de realización responsable, más aún en estos momentos de tanta dificultad de trabajo para muchas familias.
Estos últimos días están siendo de mucho trabajo, muchos detalles que se van presentando referente a nuestra Semana de la Familia. Pero ha habido uno que nos ha llenado de alegría.
Cuando programamos por junio pasado las fechas de la semana, no caímos en la cuenta de que comenzábamos precisamente el Domingo de la Misericordia. Ahí vemos como El va por delante, El hace su programa: Ver la familia, ponerla delante de Dios, “Ante Dios”. Que abismo de amor y misericordia; decía D. Javier en el 2008, hablando en la Semana de la Familia sobre la Roca que se construye cada familia, unas palabras que nos parecen de tal belleza y que recoge perfectamente quien es Cristo para la familia: «Lo que hace del matrimonio un sacramento es que el amor de un esposo y una esposa cristianos, es decir, que conocen el amor de Cristo, y que conocen quién es Cristo, tiene tal espesor, tal densidad en sí mismo (y estoy hablando del amor, y de todas las formas y manifestaciones del amor), que ese amor es signo de que Cristo vive y es el Redentor del hombre. Y es el Esposo pleno. Es decir, es quien cumple los deseos más profundos de felicidad y de plenitud del hombre, y del cual es imagen ese amor de los esposos: como amor incondicional, como amor sin límites, como amor fiel, como amor para siempre…”
¡Qué oportunidad de vivir nuestra fe en familia! qué hermoso y bello vivir la fe en familia; es en la familia donde se aprende a andar y a hablar, el primer lugar donde se nos habla de Cristo y se nos enseñan a creer en El y creemos sin haberlo visto ni tocado, sin miedo ni incredulidad.
Es la fe en Cristo resucitado la que alienta la vida de la familia y la hace pequeña iglesia doméstica, comunidad donde se aprende a compartir y a repartir todo lo que tenemos, como los primeros cristianos.
LA CITA:
Domingo 15 de abril de 2012
«Apertura de la X Semana Diocesana de la Familia»
Domingo 15 de abril de 2012
«Apertura de la X Semana Diocesana de la Familia»
Santa Iglesia Catedral.
Eucaristía de las 13:00 h.
Canta en la Eucaristía la Schola de Pueri Cantores de Granada.
Eucaristía de las 13:00 h.
Canta en la Eucaristía la Schola de Pueri Cantores de Granada.