25 de marzo de 2011 – Jornada por la Vida
SUBSIDIO PARA LA CELEBRACIÓN EUCARÍSTICA
RITOS INICIALES
Monición de entrada
Nueve meses antes del día de Navidad, la Iglesia nos invita a vivir la Jornada por la Vida. Al contemplar con asombro el misterio por el cual el Hijo de Dios se une definitivamente con la humanidad, descubrimos el valor incomparable de cada persona.
Con el lema «Siempre hay una razón para vivir», somos invitados a ser testigos de esta dignidad de la vida humana acompañada siempre por el amor incondicional de Dios, especialmente en los momentos de sufrimiento, soledad o pobreza.
Acto penitencial
Tú, que te hiciste hombre en las entrañas de la Virgen. Señor, ten piedad.
Tú, que has compartido en todo nuestra condición humana menos en el pecado. Cristo, ten piedad.
Tú, que fuiste fiel hasta la muerte para que nosotros tengamos vida. Señor, ten piedad.
Se dice Gloria.
Oración colecta
Por nuestro Señor Jesucristo.
LITURGIA DE LA PALABRA
Lecturas Anunciación del Señor
Viernes 25 de Marzo del 2011
Primera lectura
Lectura del libro de Isaías (7,10-14;8,10):
Salmo
Sal 39,7-8a.8b-9.10.11
Segunda lectura
Lectura de la carta a los Hebreos (10,4-10):
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Lucas (1,26-38):
Monición a la profesión de fe
Aprovechemos este momento para contemplar y adorar el misterio de su Encarnación, aquel momento cumbre de la historia en el que Cristo Jesús inició su vida humana.
Se dice Credo.
Oración de los fieles
• Oremos por la Iglesia extendida de oriente a occidente. Para que, a ejemplo de la Virgen María, acoja, celebre y anuncie el Evangelio de la vida. Roguemos al Señor.
• Oremos por los gobiernos y los legisladores de las naciones. Para que, iluminados por el Espíritu Santo, protejan eficazmente el derecho de la vida desde su inicio hasta su fin natural. Roguemos al Señor.
• Oremos, de un modo especial, en esta Jornada por la Vida, por todas las personas que sufren la enfermedad, la soledad o cualquier tipo de minusvalía o pobreza. Para que descubran la dignidad de su vida llamada por Dios a dar fruto abundante. Roguemos al Señor.
• Oremos por todas las personas que en la Iglesia entregan generosamente su vida a las personas que sufren, mostrando que siempre hay una razón para vivir. Para que el Señor sostenga y bendiga su labor. Roguemos al Señor.
• Oremos agradecidos por las instituciones eclesiales y civiles que ofrecen un apoyo integral a las mujeres gestantes. Para que no les falte nunca nuestra oración y apoyo. Roguemos al Señor.
• Oremos por los científicos y profesionales de la medicina. Para que apoyen siempre la vida y rechacen toda práctica contraria a la dignidad del ser humano. Roguemos al Señor.
• Y oremos por nosotros, que nos preparamos para renovar en la noche santa de la Pascua el Bautismo por el que fuimos incorporados a la vida nueva de la gracia. Para que, animados por esta Jornada y alimentados con el pan vivo bajado del cielo, estemos siempre dispuestos a defender el gran don de la vida humana. Roguemos al Señor.
Oh Dios, Creador nuestro, escucha nuestras súplicas confiadas: que la Virgen María, Madre de tu Hijo, acompañe los trabajos en defensa de la vida e ilumine a todas las madres para que reconozcan en sus hijos que van a nacer el bien que puede llenar de alegría y plenitud sus vidas; y a nosotros, creados a tu imagen y semejanza, concédenos anunciar con fidelidad el Evangelio de la vida.
Por Jesucristo nuestro Señor.
RITO DE CONCLUSIÓN
Oración después de la comunión
Bendición solemne
R. Amén.
Que os acompañe siempre la protección de la Virgen, por quien habéis recibido al Autor de la vida.
R. Amén.
Y a todos vosotros os conceda el Señor de la vida la alegría del Espíritu y los bienes de su reino.
R. Amén.
Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo + y Espíritu Santo, descienda sobre vosotros.
R. Amén.
Muchísimas gracias por el aporte