
Además hay que destacar que a pesar de que al inicio de la conferencia casi no se podía oír por los gritos de personas a favor del aborto la intervención del moderador que invitó a que entrasen en la sala y que después preguntasen y dijeran lo que quisieran hizo posible el dialogo más allá de la diferencia de opiniones.
Después en la cena en un grupo más reducido al hilo de algunas preguntas defendió la importancia de la familia y el ejemplo de los padres a la hora de educar a los hijos en esa cultura de la vida que se desarrolla con la base del Amor con mayúsculas que nos la da Jesús.
RESUMEN QUE HAN MANDADO LOS ORGANIZADORES:
La conferencia de Benigno anoche en Granada fue apasionante. Es una historia de ilusiones, de no tener miedo a descubrir la verdad en la que todos, sin excepción fuimos protagonistas.
Me emocionó que cuando unos reventadores, -ajenos al ámbito universitario-, querían destrozar la conferencia, un grupo de universitarios se levantó de manera espontánea de sus asientos y salieron a defender la libertad de expresión, frente a los radicales excluyentes. Sin contar con que el decano de Medicina, supo dialogar con ellos magistralmente, para convencerles que hay que respetar y escuchar para exponer razones.
Y es que como quedó demostrado, entre los asistentes, había todo tipo de opiniones.
***Eso es una maravilla.
Benigno Blanco hizo un recorrido sobre la situación actual del aborto, en revisión en muchos países del mundo y la casuística real, -a pie de obra-, con la que se encuentran cada día las asociaciones y los voluntarios que atienden a las madres embarazadas con problemas.
No existe el paraíso que algunos nos pretenden mostrar detrás de abortar, y si, una verdadera tragedia ante la que, -cada vez más-, se cuentan con voluntarios extraordinarios con un corazón “así de grande”.

O con el comentario de un profesor que relató que alumnas suyas han abortado con ¡¡15 años!!! y que quedan trastornadas afectándoles en los estudios.
Esa es la vida real.
Un día sensacional para el debate y la reflexión, más allá de los dogmas sensibleros y para encontrarnos con una sociedad que ya no se traga teorías caducas, desconsideradas para la mujer y negativas para el ser humano.