FAMILIAS QUE SE ENCUENTRAN CON JESÚS:
FAMILIAS DISCÍPULAS Y MISIONERAS.


Ayer comenzamos con la Eucaristía en la Santa Iglesia Catedral la XII Semana Diocesana de la Familia. Don Javier, nuestro arzobispo, centró parte de sus palabras en la necesidad que tiene toda persona de encontrarse con Dios, solo desde la experimentación del amor infinito de Dios hacia el hombre, de ese misterio de predilección por cada uno de nosotros, es cuando, desde ese conocimiento cuando podemos experimentar que nos podemos querer, y queriéndonos podemos querer a los demás: solo de Dios nace el amor.
Amor y entrega que encuentra su culmen en la Eucaristía verdadera “Escuela del matrimonio”.
Acogió con calidez a las familias que nos habíamos congregado en la Catedral para comenzar estos días de reflexión, oración, testimonios y fiesta alrededor del a familia y animaba a seguir trabajando por la familia mirando a Jesús “la fuente de agua viva”.

Ha comenzado D. Blas centrándola familia en el magisterio del Papa Francisco, llamando la atención como en lo referente a la familia parece indicar que es un tema que merece un mayor estudio y profundización, de ahí el próximo Sínodo extraordinario sobre los desafíos pastorales de la familia en el contexto dela nueva evangelización.


Un programa que debe de ir más allá de una semana, un programa para toda una vida.